Sabemos que nuestro mundo está siendo actualmente azotado por una enorme crisis a todos los niveles; a ello no se ha sustraido las prácticas, la fé y las costumbres religiosas.

Desde hace ya algún tiempo se observa el creciente irrespeto que muestran algunos recien llegados a los diferentes sectores sociales y religiosos; esto nos induce a repensar, porqué evidentemente algo está pasando que da lugar a ésta disociable reacción.

El estudio de la misma señala, que los mayores han dejado de asumir sus responsabilidades como orientadores y conductores en la vida social de los menores.

Esta ausencia de dirección, fuerza a que surjan cada vez más expresiones tendientes a la exaltación de nuevas formas que suplan las faltas de orientación de los mayores, que impele al irrespeto. Con esto dicho no pretendo establecer ineptitud alguna de los mayores, puesto que precisamente son estos los que en los momentos de las grandes crisis por la que atraviese la Humanidad, se recurre a ellos para que aporten las necesarias y mas oportunas soluciones frente a éstas.

En nuestro mundo IFA-OCHA, somos testigos de constantes irrespetos creados por las mismas actitudes de los mayores anteriormente señaladas. Se requiere que los mayores no dejen de asumir sus responsabilidades como tales, deben de ejercer la firme exigencia de los principios y conceptos ético-morales que adornan nuestra creencia religiosa; empezando con el ejemplo y continuando con las presiones necesarias para su cumplimiento en el conjunto de prácticas y costumbres religiosas.

El mayor debe hacer sentir su condición con justicia, equidad, humildad y firmeza, asi como los señalamientos pertinentes en cada caso.

Durante la permanencia de ASOIFA en el escenario religioso ésta tuvo entre sus premisas, la orientación, información e identificación entre otras inspirada en nuestra moral y ética, cumpliendo las razones para lo cual fue creada. Asi con la participación de un numeroso grupo de mayores, realizó sus funciones cavalmente; pero ante la insistencia de ASOIFA de ampliar la unificación ya en marcha con la creación de los Consejos de Mayores, nos topamos con las insistentes oposiciones de los ambiciosos de poder, con los mercaderes y falsos religiosos que buscan la subordinación de IFA-OCHA a determinados lineamientos políticos, que habiendo obtenido grandes apoyos de elementos políticamente poderosos con fines y propósitos destructivos y/o de controlar y dirigirla hacia malsanos objetivos. Los menores fueron empleados como punta de choque en el seno de ASOIFA creando la confusión de ideas, efectuando y apoyando irrespetos a mayores; a esto le añadieron la ejecución de prácticas y usos de poderes oscurantistas con el propósito de la eliminaciones físicas de los principales ejecutivos y familiares de la directiva de ASOIFA.

No resulta nada halagüeño ver familiares envueltos en graves peligros existenciales causados por las malas intenciones de tales gentuzas, esto obliga a tomar decisiones que aseguren la integridad de los familiares amenazados; de ahí una de las razones de la disolución de ASOIFA.

Los menores que con buenas intenciones se acerquen deben de asimilar las prédicas que les ofrezcan las sinceras orientaciones, consejos y enseñanzas de los mayores.

Es lamentable que las situaciones y hechos expresados conlleven a una mayor desunion por la indiferencia de cierta parte del conjunto religioso en existencia.

No se puede ni se debe seguir siendo indolente frente a tanta desverguenza so pena de llegar a ser considerado un desvergonzado también.

Nuestro deber como mayores religiosos provenientes de ASOIFA, es continuar nuestra vigilia por el cumplimiento de los principios éticos-morales de IFA-OCHA, y continuar brindando orientaciones, consejos y ejecución de las obras de protecciónes necesarias para el país las cuales seguiran exponiendose a traves de la pagina: WWW.ASOIFA.NET.